Te cuento una historia.
Un miércoles cualquiera, iba en un Uber camino a un show importante. Una gran empresa me había contratado, y aunque debería sentirme emocionado, mi mente empezó a jugarme sucio: “¿De verdad me merezco esto? ¿Y si alguien se da cuenta de que no soy tan bueno?” Sí, el síndrome del impostor se subió al carro sin que lo invitara.
Pero justo cuando estaba en esa nube de dudas, algo cambió. Decidí dejar de cuestionarme y mejor agradecer. Agradecí todo lo bueno que me había pasado, las oportunidades, el trabajo duro. Y ahí, entre semáforos y calles, me vino una idea.

¿Cómo saber qué tan cerca estás de cumplir tus sueños?
Se me ocurrió una especie de teoría, como una brújula para medir nuestro progreso. Es simple, práctico y, te prometo, hasta divertido de hacer. ¿Te interesa? Aquí va.
Pero justo cuando estaba en esa nube de dudas, algo cambió. Decidí dejar de cuestionarme y mejor agradecer. Agradecí todo lo bueno que me había pasado, las oportunidades, el trabajo duro. Y ahí, entre semáforos y calles, me vino una idea:
¿Cómo saber qué tan cerca estás de cumplir tus sueños?
Se me ocurrió una especie de teoría, como una brújula para medir nuestro progreso. Es simple, práctico y, te prometo, hasta divertido de hacer. ¿Te interesa? Aquí va.

Un ejercicio para saber donde vas en tu camino hacia el éxito
Lo primero que tienes que hacer es pensar en esas personas que admiras en tu campo. Sí, esas que parecen inalcanzables pero que te inspiran a lo grande. Haz una lista de 3 a 5 nombres.
¿Ya los tienes? Ahora, vamos a ver en qué etapa estás con respecto a ellos:
Solo los has visto en libros, videos o redes sociales.
Si estás aquí, ¡felicidades por comenzar! Es la etapa donde todo es emocionante porque estás soñando en grande, aunque los resultados aún no lleguen. Es como estar viendo un concierto desde las gradas: el show te motiva, pero todavía estás lejos del escenario.Has ido a eventos donde ellos están.
Ya diste un paso adelante. Ahora estás en el mismo espacio físico, aunque no haya interacción directa. Es como entrar al estadio; sigues siendo espectador, pero el ambiente ya se siente diferente.Los conociste y hablaste un poco con ellos.
¡Esto ya es otra cosa! Aquí empieza a haber contacto. Tal vez intercambiaron un par de palabras o compartieron una foto. Eso sí, cuidado con quedarte a mitad del camino. ¿Empezaste este viaje solo para detenerte aquí?Te los encuentras seguido y te saludan.
Ahora ya formas parte del círculo. No eres un extraño, y aunque la relación no sea cercana, ya te reconocen. Es como ser un habitual en los mismos lugares: empiezas a ser alguien en el radar.Reconocen tu trabajo y hasta hablan de ti.
Aquí sí puedes decir que lo lograste. Estas personas ya no solo te conocen, ahora valoran lo que haces. Quizás hasta colaboren contigo o se conviertan en amigos.Te admiran o hasta te ven como competencia.
Este es el nivel final. No solo formas parte del grupo, ahora tú también inspiras a otros. Te conviertes en esa persona que alguien más pondrá en su lista al comienzo de su camino.
No te detengas a mitad del camino
Algo que me he dado cuenta es que muchos se quedan en la etapa 3 o 4. Es como si alcanzaran cierta comodidad y pensaran: “Ya con esto estoy bien.” Pero, ¿para qué empezar algo tan grande si te vas a quedar a medias?
Imagina que el camino hacia tus sueños es una carretera. Si te detienes a mitad, no solo te quedas varado tú, también bloqueas el paso para otros que vienen detrás. Así que sigue avanzando. Un paso más, aunque sea pequeño.
Además, cuando llegas al “éxito” (sea lo que sea que eso signifique para ti), te das cuenta de que no es el final. Siempre hay más por aprender, más por crear, y más personas a las que puedes inspirar.

Un ejercicio práctico (¡manos a la obra!)
Te propongo algo. Toma un cuaderno o abre una nota en tu celular:
- Escribe los nombres de esas 3-5 personas que admiras.
- Ubícate en qué etapa estás con cada una de ellas. Sé honesto.
- Ahora piensa: ¿qué puedes hacer para avanzar al siguiente nivel?
Por ejemplo:
- Si estás en la etapa 1, busca eventos donde puedas verlos en vivo.
- Si estás en la etapa 3, intenta destacar tu trabajo de forma genuina para que lo noten.
- Si estás en la etapa 5, ¡felicidades! Pero ahora piensa en cómo puedes convertirte en un referente para otros.
Haz esto cada cierto tiempo. Te sorprenderá lo lejos que puedes llegar si eres constante.
El ciclo de la inspiración
Lo bonito de perseguir tus sueños es que, en el proceso, te transformas. Llegará un momento en el que las personas que admirabas ya no solo sean tus ídolos, sino tus colegas, tus amigos, incluso tus fans.
Y así es como funciona este ciclo: hoy admiras a alguien; mañana alguien te admirará a ti.
Este video lo grabé hace en 2018 (creo ajajá), aun el mensaje se mantiene. Entre más pronto empieces, más pronto llegarás, siempre y cuando no te detengas en el camino.
Entonces, dime: ¿Dónde estás hoy? ¿Y qué vas a hacer para dar el siguiente paso? Porque cumplir tus sueños no es cuestión de magia, sino de constancia. Y créeme, estás más cerca de lo que piensas.